Ni pies ni cabeza...

Contigo soñé, no sé como fue, pero me desperté con tu nombre en la cabeza...desconcertada y desorientada...como si hubieses estado a mi lado.

No quiero que se me note, no lo puedo controlar.

Tengo miedo de explicar lo que se me pasa por la cabeza, no quiero que pienses que estoy colgada de ti.

El amor no tiene ni pies ni cabeza y transforma todo lo que ves. Hace que el corazón lata tan fuerte que el corazón se queda pequeño.

Tengo vivo el recuerdo de aquel sueño extraño.

Lo siento más fuerte que si fuese real, pero hago como si nada, me hago la distraída, no vaya a ser que se note que estoy tocada.

Tarde o temprano tengo que perder el miedo y hacer frente a esta situación, decirte que me muero por estar a tu lado sin miedo de que se me rompa la voz.